Confieso que hice esta receta sólo para comprobar que realmente se conseguía la textura de esta golosina fácilmente.
Como es para mí bastante empalagosa, la hice con la poca pulpa de maracuyá que me quedaba en el congelador, para darle ese toque ácido que nos encantó. Os explico como extraer la pulpa o zumo de esta fruta aquí.