Receta milenaria para "espantar as meigas" según la tradición gallega.
La verdad es que resulta una forma muy divertida de terminar una enchentuada/fartura/comilona.
Resulta digestiva después de una comida copiosa, pero cuidado, si te pasas lo que coges es una COGORZA MONUMENTAL !!!!
Hay mucha leyenda alrededor de la queimada, incluso un conxuro para recitar apagando las luces cuando se está terminando de hacer (para esto ya tienes que tener un "puntito").
Podéis encontrar el conxuro y un poco más de información sobre el orujo en esta página: www.orujodegalicia.org.
Hay varias recetas todas más o menos iguales con algún cambio según los gustos del quemador pero que no varían mucho el resultado final.
Yo os pongo la que elaboró Pedro en su casa este sábado que estaba muy buena. Esta vez tocó en su casa.....el pistoletazo de salida para las fiestas de verano (aquí en Galicia, las enchentuadas son frecuentes, como en la mayor parte del país, sobre todo cuando comienza la temporada de verano....una fiesta tras otra, basadas prácticamente en comer a reventar y echarte unas risas para luego bajarlo bailando en la romería....no hay manera de mantener la línea)
Por desgracia, esta bonita costumbre también está yendo cada vez a menos.......espero que se consiga mantener con el tiempo pero las nuevas generaciones creo que no están por la labor..............una pena.
Ingredientes:
2 litros de orujo blanco
12 a 18 cucharadas de azúcar (depende de lo dulce que te guste)
la monda de un limón
3 rodajas de naranja
un puñado de granos de café
Elaboración:
En una cazuela de barro cocido, verter todos los ingredientes.
Estas cazuelas son muy fáciles de encontrar en Galicia...no sé en otros sitios, pero supongo que en caso de necesidad podrás usar una pota vieja a la que no tengas mucho aprecio ya que se quema toda en los bordes.
Con un cazo (garfelo) se toma un poco de azúcar del fondo con orujo y se le prende fuego, acercándolo poco a poco al recipiente para que prenda todo.
Ir removiendo con el garfelo para que vaya quemándose el alcohol, primero líquido de la superficie y luego vais cogiendo también azúcar del fondo.
Todo esto, por supuesto, con mucha precaución. Si no tenéis un cazo apropiado, protegeros las manos con algún trapo o manopla de cocina para no quemaros.
El tiempo de quemado es a gusto del consumidor pero debe quedar algo fuerte si no quieres que te quede un agua almibarada. Para esta cantidad de 2 litros, 20 minutos son suficientes, removiendo poco a poco para ayudar a quemar el orujo. Podéis ir sacando un cacito y probando para ver si está a vuestro gusto o está aún muy fuerte.
Pasado este tiempo y al dejar de remover, el fuego se apaga solo. Lo normal es que se quede reducida prácticamente a la mitad la cantidad de licor.
Se toma caliente o templada, en cacitos o pocillos, poco a poco procurando no quemarte y bebiendo con sentidiño, como dicen aquí. Como está dulce, se sube fácil y cuando te descuidas no te tienes de pie, sobre todo porque cuando tomas la queimada, ya vienes con la bebida de la comida encima.........
NO DEJÉIS DE PROBARLA Y, YA SABÉIS......CON SENTIDIÑO