OREJAS DE CARNAVAL de CORUXOU (ORELLAS DE ENTROIDO)

Esta es mi particular receta de Orejas de Carnaval. Ya se que no son las míticas orejas de carnaval que se hacen en el 90% del territorio de Galicia, pero son las que hacía la abuela de mi marido, y siguen haciendo ahora sus tías, y a mí me gustan más que las habituales.

La receta es muy similar a las típicas orejas, pero con levaduras, si, en plural, porque llevan levadura fresca de panadería y levadura en polvo, cosa que me sorprendió mucho.

No sé porque la abuela María las elaboraba así, ni porque las llaman orejas, pues apenas he encontrado referencias a esta receta, pero son las orejas que tomamos todos los años en carnavales en Coruxou (Irixoa- A Coruña) y así las he llamado.

La única receta casi igual que he encontrado ha sido en el blog de Marisa, "La Gamela" Cocina con Cariño. Allí las llaman Chaolas de Cariño , también son típicas de Carnaval y la receta es prácticamente igual, pero con manteca de vaca o mantequilla.

La receta me la han dado "a ojo", como siempre hacen nuestros mayores, pero la verdad es que me han salido prácticamente iguales a las que hacen allí.

Ingredientes:

500 gr. de harina de repostería (y algo más para terminar bien el amasado).

1 sobre de levadura en polvo (yo uso Royal).

Ralladura de un limón y su zumo.

3 huevos.

Una pizca de sal.

150 ml. de leche templada.

1 chorro de aceite de oliva.

1 chorro de anís.

3 cucharadas de azúcar (una por cada huevo).

7 gr. de levadura fresca (aprox. un cuarto del cubo de 25 gr. que venden).

Azúcar para espolvorear.

Aceite de girasol o de oliva para freírlas.

Elaboración:

Elaboramos la masa mezclando por un lado los ingredientes líquidos y por otro los sólidos:

- En un recipiente amplio, ponemos la harina, la levadura en polvo y la ralladura del limón.

- En otro, batimos muy bien los huevos, y añadimos una pizca de sal, un chorro de aceite de oliva, un chorro de anís (al gusto), las 3 cucharadas de azúcar y la levadura fresca disuelta en un poco de leche fría.

- Mezclamos todo muy bien y añadimos los 150 ml. de leche templada, tirando a caliente. Mezclamos de nuevo y añadimos el zumo del limón.

- Hacemos un volcán en la harina y ponemos la mezcla líquida dentro. Mezclamos un poco con una espátula o una cuchara de madera, hasta que podamos amasar con las manos.

- Espolvoreamos con harina la superficie donde vamos a amasar y pasamos para allí la masa. Si está muy suelta, añadir un poco más de harina, pero que no quede muy dura.

- Amasamos todo muy bien (unos 10 minutos) haciendo una bola y lo dejamos reposar tapado con un paño en un lugar cálido durante unas dos o tres horas.

Ahora solo hay que ir cortando porciones de masa y hacer unas bolas que aplastamos con las manos lo mejor que podamos para que queden unas formas ovaladas similares a las orejas.

- Poner una sartén grande con abundante aceite de girasol o de oliva, a temperatura media-alta (del 0 al 9, en el 7).

- Freír las orejas poco a poco, de tres en tres, estirándolas con las manos al echarlas en el aceite y "bailándolas" continuamente con dos tenedores para que se doren por igual por todas partes.

- Ir poniéndolas en una bandeja con papel absorvente para eliminar el exceso de aceite y espolvorearlas con azúcar.

Os quedarán unas más infladas que otras, y algunas solo infladas por los bordes, pero son así, según va pasando el tiempo la masa va cambiando y no quedan todas igual.

Quedan con agujeros por el interior y algunas completamente huecas. Me encantan!. El sabor es muy suave y no son excesivamente dulces ni grasientas.

Probadlas para variar. Os encantarán!

Como mejor están es recién hechas, templadas casi frías, al día siguiente pierden un poco la textura.